viernes, 4 de marzo de 2011

La semilla inmortal

La gran mayoría de las películas que vemos están basadas en relatos previos. Prácticamente pienses en la película que pienses hay un relato, cuento u obra precedente que es la raíz de esa película. No lo digo yo, es algo que está bastante estudiado y sobre lo que se han escrito multitud de obras (al respecto te recomiendo “La semilla inmortal”). “Inteligencia Artificial” de Spielberg es Pinocho, “El Orfanato” es Peter Pan, “Matrix” es Alicia en el País de las Maravillas, “Black Swan” es... claro, obviamente, El Lago de los Cisnes.

¿Y “La Red Social”?

Pues, obviamente, “Fausto”. Y es que ésta es la historia de un hombre que vende su alma al diablo para tener el mundo a sus pies... con el fin de lograr el amor de la mujer que ama. En este caso Mefistófeles está representado por Sean Parker (interpretado por Justin Timberlake) y la pobre Gretchen es Erica en el filme (interpretada por Rooney Mara). Por cierto que también hay un personaje llamado Gretchen.

Especialmente significativo es el momento en la discoteca, con imágenes como ésta que no dejan lugar a dudas sobre el carácter de cada personaje. Escena en la que, por cierto, vemos la auténtica motivación de Zuckerberg para vender su alma: la chica. Inundar en esta escena a Parker de colores rojos intensos puede parecer poco sutil pero... es que funciona de maravilla.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La tentación personificada: fiestas, lujos, mujeres...y sobretodo que en esa escena se habla de dinero, dinero, más dinero y poder.

Buena reflexión.

Ortuño dijo...

Pues sí, una reflexión que le debo sobre todo a mi charla hace poco con mi amigo el Reverendo, del cual, por cierto, os dejo el enlace a su blog:
http://ringdelamentira.blogspot.com/
Saludos blogueros.